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Principios para líderes potenciales
                    Costa Deir

Los conceptos proverbiales presentados en este curso de Principios para Líderes mantendrán la mente despierta para recibir la verdad. Presenta cápsulas compactadas para el estudio personal. Cada afirmación breve, concisa, se entiende fácilmente y por su brevedad, previene la monotonía en el proceso de aprendizaje. Impacta con rica variedad, en ocasiones a las emociones, otras veces al intelecto. Pero, sobre todo, mueve la voluntad en nuevas direcciones hacia un mayor progreso cristiano. Conlleva a la personalidad por fuerza de su iluminación en sendas más brillantes, más saludables de la vida. Estos conceptos de verdad modifican formas de pensar, elegir y actuar, siempre apuntando a la

excelencia, siempre moviéndose hacia niveles más y más altos de madurez en Cristo.

 

Introducción.

 

La Universidad del Espíritu Santo está abierta a solicitantes en todo tiempo. Cada cristiano debería estar en entrenamiento, tanto en una forma general, para poder descubrir su llamamiento y potencial escondido, como más específicamente, para desarrollar su potencial a lo máximo. Un líder potencial es una persona que tiene talentos latentes aún adormecidos y que espera entrenamiento en orden a desarrollarlos a la plena fructificación. La preparación de hoy en la vida de un líder le da la habilidad para demostrar en el mañana. Los líderes potenciales son de lo más valioso en el Reino de Dios. Son los prospectos futuros con excelente calidad y calibre para asumir una tremenda responsabilidad en el rol del liderazgo. Su entrenamiento sobre la marcha en la disciplina del carácter, administración y ministerio., asegura la salud, vitalidad y efectividad de la iglesia en su misión de amplitud mundial. Aquí adentro, el lector hallará una riqueza de material condensado y edificante para enriquecer su vida para una mayor productividad en el ministerio. El curso cubrirá la preparación para calificar para el liderato, desarrollando progreso en el periodo Básico de Entrenamiento, así como también introspecciones sobre la influencia y efectos del liderato, el proceso de maduración y el precio del liderato. Dios nos ayude a desarrollar todo el potencial que está en nosotros a su extensión más plena para ser de lo más efectivo en el Reino de Dios.

 

 

 

 

Principios.

 

1. Caminar en el temor de Dios es el primer

prerrequisito para el liderato.

 Filipenses capítulos 2: verso 12;

y 2°de Samuel capítulo 23: verso 3 al 4.

 

2. Ningún líder puede tener una visión real del

propósito de Dios para su vida, hasta que él

conozca lo que está en el corazón de Dios. Para

poder hacerlo debe caminar en el temor de Dios.

Samuel. Capítulo 25:  verso 14 y capítulo 57 verso 2.

 

3. La relación de un líder hacia Dios debe ser el

primer principio divino de vida, que garantiza el

éxito de su liderato. Proverbios capítulo 3: verso 5 y 6;

Marcos capítulo 3: verso 14 y 15.

 

4. El líder que tiene un sentido despierto de

dependencia en Dios, continuamente hace su

relación con Dios genuina y real en su experiencia

divina. Juan. capítulo 15:  verso 5;

 Salmos capítulo 71:  verso 6.

 

5. Bendito es el líder que se da cuenta que la

relación con Dios debe sellarse con un compromiso,

cuyo precio continuo será la sumisión al Espíritu

Santo, para que obre el principio de la cruz en su

vida. Sólo en la medida en que esté dispuesto a

pagar tal precio, continuamente cooperando con el

Espíritu Santo, puede esperar fortalecer su relación

con Dios y cambiar de lo que es a lo que debiera

ser. Hechos Capítulo 1: verso 8; Lucas Capítulo 9: verso 23, 24.

 

6. Entre más rápido un líder responda a Dios, más

pronto revela la fuerza de su compromiso de

relación a Dios. El titubeo revela una lucha de la

voluntad. Juan Capítulo 3: verso 5;

1° Samuel Capítulo 3: verso 19; 19.

 

7. Entre más cerca viva un líder de Dios, se vuelve

más serio en su relación, en su caminar y en su

servicio a Él. Salmos capítulo 37: verso 23, 24.

 

8. Así como un río se torna más quieto al fluir más

profundo, así un líder se vuelve más calmado en su

interior y más quieto en lo exterior, al crecer en

profundidad su relación con Dios. Salmos capítulo 37: verso 37.

 

9. Cuando la relación de un líder con Dios es

correcta, experimenta el gozo del Señor dentro de

su alma, haciendo su rostro radiante, su

personalidad chispeante y sus maneras

encantadoras. Aún su respiración está llena de

entusiasmo y exuberancia. Salmos capítulo 16:

verso 11; Éxodo Capítulo 34: verso 29.

10. Cuando un líder está fuera de relación correcta

con Dios, su lenguaje y su conducta lo traicionan.

Mateo capítulo 12: verso 34, 35.

 

11. El líder que hambrea espiritualmente, no

experimentará la realidad de Dios en su vida diaria

y nada tiene que ofrecer a sus seguidores, sino

cáscaras vacías. Lucas Capítulo 15: verso 11-32;

Capítulo 4: verso 4; Colosenses capítulo 3: verso 16.

 

12. Si un líder no se encuentra con Dios en una

manera fresca y se quebranta delante de Él

diariamente, en verdad no sirve a Dios y a su

causa. Proverbios capítulo 29: verso 1;

Salmos capítulo 51: verso 11, 12, 17.

 

13. El líder que fácilmente es influido y afectado

por su ambiente en lugar de influirlo, revela

inestabilidad interna debido a una falta de

mantener una correcta relación con Dios.

Juan Capítulo 10: verso 12;

1ª..de Corintios capítulo 10: verso 1-14.

 

14. Cuando un líder establece y mantiene una

fuerte relación con Dios, le instila en su interior

plena seguridad en cada paso que toma, y lo

convierte en un retador de lo imposible.

Números capítulo. 14: verso 24.

 

15. Un líder que mantiene su correcta relación con

Dios por comunión diaria; prueba prácticamente

que su experiencia con el Señor siempre es fresca y

refrescante a otros. Salmos capítulo 84: verso 4-7.

 

16. La vida del líder que vive más allá del velo,

encontrándose con Dios en manera fresca sobre una

base diaria, se caracteriza por quebrantamiento,

contrición, vacío y una sensación de insignificancia,

sin embargo, goza del derramamiento de la

plenitud de Dios. Isaías capítulo 57: verso 15

 

17. Un líder puede tener una gran historia tras él de

logros exitosos, pero a menos que mantenga su

caminar diario con Dios en una relación

progresivamente más cercana, se encontrará así

mismo al borde del desastre por descansar en el

pasado. Jueces capítulo 16: verso 20;

Juan capítulo 15: verso 1-11;

Filipenses capítulos 3: verso 12-14.

 

18. Así como una pobre oveja no puede cargar su

propia lana, así es un pobre líder que no puede

cargar sus propias responsabilidades. Él se

descalifica prontamente del rol del liderato, porque

el liderato y la responsabilidad son sinónimos.

I Tesalonicenses capítulo 4: verso 14;

 II Tesalonicenses capítulo 3: verso 10;

Proverbios capítulo 27: verso 23.

 

19. El líder que es negligente o rehúsa tomar

responsabilidades personales o disciplinarse así

mismo es absolutamente incapaz para disciplinar a

sus seguidores. Ningún líder tiene el derecho de

colocar barreras a su gente junto a las cuales él

mismo rehúsa permanecer. No hay líderes de

impulso libre en el rol del verdadero liderazgo.

Lucas capítulo 14: verso 25-27, 33.

 

20. Dios nunca va a confiar a un líder con una

mayor responsabilidad para lograr cosas mayores

para su Reino si él no es fiel en hacer las cosas

pequeñas porque las considera indignas de su

atención. Mateo capítulo 25: verso 21;

capítulo 25: verso 14-30;

 1ª..de Corintios capítulo 4: verso 2.

 

21. Cada responsabilidad que un seguidor lleva a

cabo fielmente hasta su cumplimiento, es una señal,

sin duda o titubeo, de que es un líder en potencia.

1ª..de Corintios capítulo 4: verso 2;

Mateo capítulo 21: verso 28 ss.

 

22. Un líder alerta y responsable no necesita

recordatorios para desarrollar sus quehaceres,

porque siempre está en su mejor capacidad.

Proverbios capítulo 12: verso 24; Capítulo 27: verso 23;

Marcos capítulo 14: verso 8.

 

23. Un líder ejemplar sabe que el regalo más valioso

para dar es su ejemplo piadoso, para que otros lo

sigan. II Tesalonicenses Capítulo 3: verso 7-9;

 I Timoteo capítulo 4: verso 12.

 

24. El ejemplo de Cristo debe ser el patrón de vida

para todo líder, cuya mayor búsqueda es ser fiel

bajo el Pastor. I Pedro capítulo 5: verso 1-4.

 

25. Un líder piadoso sabe que ser un ejemplo es una

forma de vida, no algo extra qué ponerse y se

esfuerza en vivir lo mejor que puede para Dios

diariamente. Mateo capítulo 5: verso 14-16.

 

26. El líder que no expresa la vida de Cristo en su

diario caminar, no tiene mucho que ofrecer, aun

cuando él sea el más elocuente.

Efesios capítulo 5: versos 15, 16;

II Corintios capítulo 4: versos 10 al 11.

 

27. El rol del liderato demanda un ejemplo de

semejanza a Cristo que otros puedan seguir.

Consecuentemente, el líder que es esclavo de

hábitos destructivos se descalifica así mismo como

líder. Romanos capítulo 6:12, 13, 16, 19, 22;

 I Corintios capítulo 9: verso 27.

 

28. Cuando un líder evalúe de tal manera la eternidad

que invierta su vida, su tiempo, sus talentos, sus

dones y su sustancia en ello, comienza a vivir una

vida que vale la pena seguir.

II Pedro capítulo 3: versos 10 al 14.

 

29. El líder que vive de talentos prestados, dinero

prestado y tiempo prestado, no tiene derecho de

estar en el liderato y a la larga debe declararse en

bancarrota de su liderato. Entre más pronto mejor.

Mateo capítulo 25: versos 1 al 13; Romanos. Capítulo 13: verso 8.

 

30. Entre menos valore el tiempo un líder, se convierte

en un necio mayor. Entre más valore el tiempo, en

un sabio mayor. El tiempo es la cosa más valiosa

que Dios nos ofrece en esta vida para poder

cumplir su voluntad y propósito. Salmos capítulo 90: verso 12.

 

31. El planeamiento divinamente inspirado, apropiado

y sabio en la vida de un líder, le habilita para

ahorrar mucho tiempo que puede, entonces,

invertir en cumplir la voluntad de Dios.

Proverbios capítulo 24: versos:3 al 6;

Efesios capítulo 5: verso 16;

Proverbios capítulo 24: versos 30 al 34.

 

32. Un líder revela la profundidad de su consagración

a Dios, por la manera en que maneja el dinero que

Dios le confía. Mateo 25:14-30.

 

33. Algunos líderes son desastres ambulantes cuando

se llega al manejo de dinero porque les falta

autodisciplina. Lucas capítulo 16: verso 1.

 

34. Un líder conocedor sabe que Dios desea que él

desarrolle sus talentos a lo máximo de su

habilidad, y que apunte hacia el alcance de su

pleno potencial diligente y sistemáticamente,

aceptando el precio de la disciplina para hacerlo

una realidad. I Timoteo capítulo 4: verso 15;

Mateo capítulo 25: versos 14 al 30.

 

35. Un líder excelente, con gran diligencia desarrolla

excelencia en sus talentos, los dones y las

habilidades que Dios le ha dado. Un corazón

preparado y una mente preparada, acoplada con

una voluntad preparada hace excelencia en el

liderato. Daniel capítulo 5: verso 12 y capítulo 6:verso 3.

 

36. Un líder que es incapaz de manejar a su esposa e

hijos sabiamente, no está preparado para manejar

gente fuera de su hogar. I Timoteo capítulo 3: versos 1 al 5.

 

37. El mayor testimonio de un líder maduro viene de

su propia familia. Salmos capítulo 112: versos 1 al 2 y

 capítulo 128; Proverbios capítulo 14: verso 26.

 

38. El líder que hace a Cristo Jesús el centro de su

matrimonio tendrá gusto, chispa y exuberancia

sobre una base continua, al cambiar JesuCristo

continuamente el agua de su vida diaria en el vino

del vivir espiritual, donde se goza la vida más

abundante. Salmos capítulo 128: versos 1 al 4;

 Gálatas capítulo 5: verso 16; Efesios capítulo 5: verso 2 y  25.

 

39. El líder cuya filosofía del matrimonio es

considerarlo un gran privilegio para fielmente

abrumar a su esposa con un amor que fluye de su

gozosa posición en Cristo quitará el trabajo

fatigoso y la frialdad de las labores diarias y lo

reemplazará con una continua renovación de la

atmósfera de amor y ellos prosperarán juntos.

Efesios capítulo 5: versos 25 al 26.

 

40. Un líder negligente con el entrenamiento de sus

propios hijos no tienen futuro, ni tampoco sus hijos.

Proverbios capítulo 22: verso 6.

 

41. El hogar de un líder debe ser de lo más importante

para él. Aquí debe invertir sus mejores esfuerzos

para producir en sus hijos lo mejor de las

cualidades de Dios, no dependiendo de la escuela

para hacer eso, porque la escuela toma la calidad

que el hogar produce como una base sobre la cual

edificar. Entonces, la sociedad edifica sobre el

fundamento que el hogar, la iglesia y la escuela

han establecido. I Timoteo capítulo 3: versos 4 y 5.

 

42. La calidad y la madurez del líder determina el

éxito o fracaso de una operación.

Josué. capítulo 5: verso 13 y capítulo 6: verso 5.

 

43. A menos que haya evidencia suficiente de madurez

en un candidato, no deberá ser elegido ni

considerado para el rol del liderazgo. De otra

manera sería perjudicial para él y para toda la

operación. I Timoteo capítulo 3: verso 1, 2 y 6.

 

44. Un líder maduro se gobierna por principios divinos

y por el Espíritu del Señor, en vez de por las

circunstancias cambiantes y el humor de otros.

Romanos capítulo 8: versos 11 al 14;

Gálatas capítulo 5: verso 16.

 

45. El líder que da la bienvenida a los tratos del

Espíritu Santo para madurar su vida, también

gozará de la guía del Espíritu Santo que lo salvará

de perder la voluntad perfecta de Dios.

Salmos capítulo 40: verso 3

Juan capítulo 17: versos 7 al 14.

 

46. El líder que se somete al Señorío de Cristo,

garantiza su propia madurez. Fil. 2:9-11.

 

47. La manera en que un líder vence los obstáculos a

lo largo del camino de sus logros, revela el nivel de

su madurez y experiencia. 1°Samuel   17:32 ss.

 

48. Resistencia es una de las grandes señales de

madurez en el liderazgo. Ésta es el factor más

salvador en su vida. Hechos capítulo 5: versos 40 al 4 y

 capítulo 14: versos 19 al 20 ss.,

II Corintios capítulo 4: versos 7 al 12.

 

49. Un líder maduro acepta la responsabilidad de sus

fallas en lugar de negarlas o justificarlas.

2°Samuel capítulo 11: verso 2 y capítulo 12: verso 14;

 Proverbios capítulo 28: verso 13.

 

50. Un líder inmaduro es básicamente irresponsable y

no se le pueden pedir cuentas.

Proverbios capítulo 25: verso 19.

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